La equipación para la Quebrantahuesos

“¿Cómo vestir para la Quebrantahuesos?” Durante los días previos a la prueba, antes de dar los buenos días, era la pregunta que más sonaba en las oficinas de Etxeondo.

(Fotografías: Quebrantahuesos | Sportograf)

Hace tres semanas la pregunta sobrevoló por primera vez en las oficinas de Etxeondo: “¿Qué elegiréis para la Quebrantahuesos?”. Alguno se animó a decir que probablemente iría con equipación veraniega pero conforme avanzaron los días y al ver cómo las condiciones climatológicas empeoraban empezaron las dudas.

La decisión final llegó dos días antes de que el equipo Etxeondo aterrizara en la Quebrantahuesos, algo polivalente, con repelencia al agua y que abrigara para esos 6ºC que se predecían en los puertos. Eso sí, que transpirara porque la carrera iba a durar seis horas (ese era el objetivo), y el cuerpo necesitaba evaporar toda esa humedad retenida. La experiencia de Imanol, con 18 Quebrantahuesos en sus espaldas, y de Haimar, junto con el resto de los componentes del equipo Etxeondo, eligieron el kit final:

La chaqueta Dena, por ofrecer la versatilidad ante cualquier condición meteorológica. Con Gore-Tex Windstopper, para aportar protección contra el frío y la lluvia. Además de dar total libertad de movimientos por su elasticidad y ajuste. Con el color, no había debate, tenía que ser el verde pistacho. Debajo de la chaqueta, la camiseta interior Leor. No hacía falta más.El culote Orhi Hydro, con Thermosystem Hydrorrepellent, esa capa ultrafina que si llovía, iba a ser determinante para limitar al penetración del agua. Además con la reducción al máximo de las costuras e incluso del bordado trasero, iba a ser crucial para mantener esa hidrorrepelencia. En el bolsillo trasero, la capa de Gore-Tex Ura (próximamente disponible), para vestirla en los descensos y mantener la temperatura corporal.

Luego entre los complementos, fue a gustos ya que aunque la mayoría eligió los guantes thermo Iri, finos, elásticos y ligeros (eso sí, los de neopreno en el bolsillo por si el tiempo se complicaba), Wouter prefirió llevar cortos, bien acolchados y suficientes para mantener la temperatura.